Pequeñas Bestias | Galantz

Editorial: La Cúpula

SINOPSIS

Mosquitos, larvas, abejas, saltamontes, mariquitas, orugas, pulgas, arañas, polillas y caracoles, bichos bola, mantis ateas y religiosas e incluso una ladilla de nombre José a la que todos dan de lado por razones obvias. Todos estos personajes y muchos otros merodean las páginas de Pequeñas bestias, donde se demuestra que hay humor más allá de la percepción humana, incluso a niveles microscópicos. Daniel Galantz pone lupa y lápiz al servicio de este universo diminuto para dar voz y manga ancha a toda clase de bichos y bichejos en el más descacharrante tratado de entomología. Nunca una plaga fue más divertida: se lo pensará dos veces antes de propinar el siguiente chancletazo. Puro humor invertebrado.

OPINIÓN PERSONAL

La felicidad se encuentra en las pequeñas cosas... como en el humor invertebrado de Pequeñas Bestias. Porque el trazo cómico de Galantz es un soplo de aire fresco. Es impresionante cómo relaciona su mundo con el nuestro, pero es que además, utiliza un sinfín de referencias a otros dibujos animados, películas de culto e incluso a chistes viejos. Al mismo tiempo, aprovecha la ocasión para realizar una crítica social a través de comentarios que invitan a la reflexión. Y en este amplio abanico de temáticas, no podía faltar un poquito de amor.

La edición de La Cúpula es tan perfecta como su contenido, una verdadera preciosidad. Y lo que es más importante que la apariencia, se trata de una recopilación muy completa, sin ninguno de esos incómodos espacios en blanco cuya única finalidad es ocupar espacio para que el libro sea más gordo.

En resumen, uno de esos libros que no te cansas de releer porque siempre te dejan con una sonrisa de oreja a oreja. Desde hoy, todas las pequeñas bestias de mi jardín se declaran fans incondicionales de la hormiga 71.