El relojero y la muerte | Sheila Moreno Griñón

Ilustración y diseño de cubierta: Libertad Delgado

SINOPSIS

Recién divorciado, médico sin empleo y mago novato, Ángel acaba de llegar a la capital escapando de su pasado para empezar una nueva vida. Sin embargo, allí le espera otro mago que no piensa dejar que dé la espalda a lo que realmente es. Mitad nihilista mitad caballero, Hëktor está siendo puesto a prueba por sí mismo, por quienes le rodean y por sus propios demonios.

Juntos, Hëktor y Ángel intentarán desentrañar la naturaleza de los poderes del médico mientras esquivan los problemas familiares, los secretos y sus consecuencias. Pero si algo sabe Ángel es que en la vida no se puede huir para siempre.

OPINIÓN PERSONAL

Unas semanas antes, Ángel Paz era un prestigioso neurocirujano con una carrera brillante, casado con su novia de la universidad y padre de una niña. Ahora duerme en un coche, su mujer le ha pedido el divorcio y su mejor amigo, el hijo del alcalde, quiere matarle. Para salir de Barcelona con vida, Ángel contacta con un mafioso que lo trae hasta Madrid a salvo.

Pero esta serie de desdichas solo será el principio de un cambio que sacudirá la vida encorsetada que ha llevado, ya que su huida hacia la capital conllevará su ingreso en la cábala de magos madrileña. Porque, a sus cuarenta años de edad, Ángel acaba de descubrir que es un mago muy poderoso.

Hëktor Klein, uno de los magos de la cábala, cree que Ángel es soso y una molestia, pero acepta convertirse en su mentor porque es una de las pruebas que tiene que superar para ser miembro de la Hermandad de la Estrella. Dicha hermandad protege a los mundanos de amenazas sobrenaturales que ellos desconocen, ya que el mundo mágico tiene la obligación de mantenerse en secreto. Si su existencia saliera a la luz, sería una catástrofe. 

Realmente no me quedan claras las motivaciones de Hëktor para someterse a las pruebas justo ahora, estableciendo un vínculo con Ángel durante persecuciones, atentados armados y un misterio por resolver. Las pruebas no aportan sustancia a la trama, son actividades bastante superfluas en distintos puntos del mapa; excepto la última, que arroja incógnitas y es uno de los ejes que vertebran el desenlace.

Los tiempos son algo caóticos y los protagonistas recorren el mapa dando tumbos y saltos, echo de menos que los movimientos sean más pausados. La premisa tiene material suficiente para construir una historia coral, pero no hila fino y el resto del elenco adolece de profundidad y coherencia. La ambientación es un escenario vacío, con cuatro extras. Se producen peleas, disparos, explosiones... y la ciudad parece vacía, no hay visión periférica de aquello que rodea a los magos. 

Por cierto, la ciudad de la Hermandad me parece un lugar curioso para visitar. Es un libro que nos lleva a rincones acogedores y familiares, como un fanart cargado de referencias y homenajes a las obras de las que bebe, introduciendo elementos nuevos que hacen algo diferente. Me ha gustado especialmente las clases de magia y criaturas que habitan el mundo. 

«Explicación rápida. Los magos son humanos con especialidades. Los devoradores se alimentan de todo lo que produce un humano. Las encarnaciones surgen de la naturaleza y sus fenómenos: encarnación de viento, de animales, o de cosas más concretas como un viento con nombre o un tipo de animal. Y luego están las fábulas, que surgen de las historias. Si un mago usa demasiado su magia, puede transformarse en una criatura sobrenatural.»

Y mientras los magos investigan quién perturba el orden del mundo humano, Ángel sobrevive como puede a la crisis de los cuarenta y se adapta a su nueva vida. Él, que siempre ha cumplido los objetivos pregenerados por la sociedad, culpa a la magia de sus males. Son pensamientos que se dicen de manera explícita, añadiendo un pequeño toque de drama social y aceptación personal a un personaje que cada vez es menos soso, como diría Hëktor.

Quizá le falta madurez narrativa, pero he descubierto una prosa prometedora y una historia con puntos interesantes, se aprecian buenas ideas para futuras novelas.

 

«¿Tienes que dejar de ser lo que eres porque a alguien no le gusta?»

«—¿Tan malo es añorar tiempos pasados?
—Cuando vives a través de ellos, sí.»