02 marzo 2019

Zero | Morgan Dark

Editorial: Rubiños 1860


SINOPSIS

Kyle Bradford es el estudiante más envidiado de Drayton College pero todo cambia cuando una peligrosa sombra empieza a acecharle desde la oscuridad. A partir de entonces su vida se desmorona. Convertido injustamente en el principal sospechoso de los robos que están aterrorizando a la alta sociedad, tendrá que demostrar su inocencia y para ello deberá encontrar al verdadero culpable: Zero, un delincuente infalible cuya identidad se oculta bajo una máscara de plata. Lo que Kyle ignora es que su enemigo guarda un secreto por el que está dispuesto a sacrificarlo todo.


OPINIÓN PERSONAL

Kyle Bradford es el estudiante más envidiado de Drayton College pero todo cambia cuando una peligrosa sombra empieza a acecharle desde la oscuridad. A partir de entonces su vida se desmorona. Convertido injustamente en el principal sospechoso de los robos que están aterrorizando a la alta sociedad, tendrá que demostrar su inocencia y para ello deberá encontrar al verdadero culpable: Zero, un delincuente infalible cuya identidad se oculta bajo una máscara de plata. Lo que Kyle ignora es que su enemigo guarda un secreto por el que está dispuesto a sacrificarlo todo.

La historia transcurre en Drayton College, un colegio en el que estudian los hijos de las mayores fortunas. En resumen, el protagonista y sus mejores amigos son tres niños ricos ligeramente insoportables con los que no simpatizo demasiado, aunque Kyle es un poco más "normal". De pronto, un detective muy pesado (en serio, muy pesado) comienza a vigilar cada uno de sus pasos, convencido de que Kyle es un misterioso ladrón: Zero.

Durante el prólogo, lo único que descubrimos sobre Zero son incógnitas. De hecho, todo el mundo lo llama Zero porque eso es lo único que saben sobre él: nada. De modo que las primeras páginas me atraparon con un misterio de lo más interesante y un montón de preguntas sin respuesta: ¿Quién es realmente Zero? ¿Cómo puede cometer un robo imposible tras otro? ¿Por qué desea que todos crean que Kyle es su verdadera identidad?

Todos los personajes están bien construidos, pero desde una distancia prudencial. La misma distancia que me impide empatizar con ningún protagonista. Todos los personajes esconden un secreto de vital importancia, de modo que no profundiza demasiado en la psicología de ninguno para no descubrirnos el pastel antes de tiempo. Solo conocemos superficialmente a un grupo de adolescentes asquerosamente ricos. Sin embargo, reconozco que he sospechado de casi todos, precisamente por esa falta de simpatía. Finalmente, incluso Kyle me es indiferente.

La novela está narrada en primera persona, excepto el prólogo y el epílogo. Los capítulos son muy breves y la autora no adorna la historia con tramas secundarias totalmente irrelevantes, así que su lectura es muy descansada.

Una lectura que ha cumplido (más o menos) mis expectativas. Simplemente, no podía parar de leer.  Por otro lado, mantiene todos nuestros sentidos alerta, a la espera de que alguna pista nos permita deducir quién es Zero y cuál es su verdadero objetivo. Aunque, desde las primeras páginas, sospechaba que encerraba una historia de fantasía que lograría sorprenderme.

Mi principal problema con esta novela es que ese extraño amago de ciencia ficción ha estropeado por completo una historia de sobresaliente. En otras palabras, el desenlace no resulta nada creíble sobre todo teniendo en cuenta que el contexto es demasiado contemporáneo para que se trate de un argumento factible. Su final me parece una salida de emergencia, la única posible para que el secreto de Zero sea una gran sorpresa.

En definitiva, a pesar de que el final me ha decepcionado, me ha parecido una lectura diferente y, sobre todo, bastante entretenida. Aunque algunas situaciones me chirriaban ligeramente, la mayor parte de su argumento está muy bien hilado de principio a fin. Salvo por esa invención fuera de época. En realidad, cuanto más analizo su desenlace, menos sentido le encuentro a casi todo.

El final es demasiado abierto, porque además no es una novela autoconclusiva. 


«Nada desaparece sin dejar rastro».


No hay comentarios:

Publicar un comentario