Psicosis | Robert Bloch

Traducción: Ester Mendía Picazo | Diseño de cubierta: Opalworks | Editorial: La factoría de ideas

SINOPSIS

Era una noche oscura y tormentosa; Mary Craine estaba exhausta, perdida, y al límite de sus fuerzas, ansiosa por darse una ducha caliente y encontrar un lugar donde pasar la noche. Cuando el Motel Bates apareció de pronto entre la tormenta, Mary pensó que era su salvación. Las habitaciones eran viejas y húmedas, pero estaban limpias, y el encargado, Norman Bates, parecía un tipo bastante agradable, aunque un poco raro... Después Mary conoció a la madre de Norman. Y el cuchillo de carnicero. La pesadilla acababa de empezar.

OPINIÓN PERSONAL

Norman Bates es un hombre de mediana edad que regenta un viejo motel. Su padre se marchó cuando era un bebé y, desde entonces, mantiene una relación enfermiza con su madre. Norman la considera una mujer posesiva que siempre le había dado órdenes, pero no tiene agallas para enfrentarse a ella e irse. Ella es todo lo que tiene y todo lo que quiere, en boca de los vecinos es un “niño de mamá”. 

Es una noche oscura y tormentosa. El motel Bates apenas tiene clientes desde que construyeron la nueva carretera, pero Mary Crane ha robado cuarenta mil dólares en la agencia donde trabaja como secretaria, lleva dieciocho horas conduciendo y ha tomado una salida equivocada de camino a Fairvale, donde espera reunirse con su prometido. 

Todos sabemos lo que que sucede en el motel, la propia sinopsis nos permite atisbar el aciago destino de Mary. Un crimen que amenaza con ser descubierto cuando un investigador privado persigue el rastro del dinero robado. La confluencia de gente en el motel se convierte a su vez en la peor pesadilla de Norman Bates, quien está obsesionado con esconder a su madre, enferma de la cabeza, para que la policía no la encierre en un psiquiátrico.

Es imposible sorprenderse con el final porque es un clásico gracias a la grandísima adaptación de Hitchcock. No obstante, conocer el desenlace de antemano me ha permitido apreciar los recursos literarios. El autor solo necesita dos páginas para describir el escenario de los sucesos y acotar la psicología de Norman.

Empiezas a leer y te advierte que la historia transcurre en una carretera secundaria, próxima a pantanos. Del motel sabemos que «Allí todo estaba y era ordenado; los cambios solo se producían en el exterior. Y la mayoría de los cambios albergaban una amenaza potencial.» Solo con esa frase en las primeras páginas ya intuimos la personalidad de Norman y el futuro que le espera a quienes amenacen su orden.

Siempre he encasillado esta historia en suspense psicológico, pero recientemente he leído que además está considerada obra pionera del género slasher. Cierto es que marcó tendencia en el mundo literario cuando este tipo de final no era predecible y trillado como hoy en día. El último capítulo es el cierre perfecto.

«Creo que, tal vez, todos nos volvemos locos en ocasiones.»

«Ninguno estamos tan cuerdos como pretendemos estar.»