El fantasma de los huevos | Mike Lightwood

Diseño de la cubierta: Ariadna Oliver

SINOPSIS

Un frío gélido que te despierta en mitad de la noche. El sonido del viento que se oye a través de una ventana cerrada. El eco lejano de una voz... una voz misteriosa que comienza a cantar. Una voz que canta... ¿canciones de Britney Spears? Ya está aquí otra vez EL FANTASMA DE LOS HUEVOS.

OPINIÓN PERSONAL

El protagonista de esta parodia paranormal se despierta de madrugada a principios de octubre, sintiendo un frío intenso, y escucha una voz que canta canciones de Britney Spears en español (por aquello de los derechos de autor). Lejos de lo que pueda parecer, la aparición da bastante repelús: figura blanca y espectral, cuencas de los ojos vacías, la piel pegada al cráneo como si se tratara de un cadáver en descomposición...

Solo se aparece en su habitación de noche, más o menos a la misma hora, y cuando entran sus padres desaparece. Durante páginas el fantasma responde únicamente con estrofas que curiosamente tienen algún sentido en la conversación que intentan mantener. Las canciones traducidas guardan cierto paralelismo con lo que está sucediendo y encajan.

La cubierta resume bien el contenido de esta novela corta: lo primero que ves es una fotografía seria y de pronto lees un título cómico. Mezcla una historia bien escrita que concede profundidad al fantasma, con un trasfondo emocional sobre la soledad que no esperaba, pero al mismo tiempo es todo demasiado absurdo.

Sentía curiosidad por el desenlace de esta experiencia con el más allá, pues intenta hablar en prosa con el fantasma para descubrir por qué se aparece y por qué no le deja en paz. El final en esencia me ha parecido bueno, aunque siento que le falta recorrido para que funcione mejor.

Este experimento literario es una ida de olla nacida de un tweet que preguntaba «¿Por qué todos los fantasmas son del siglo XVII o por ahí? ¿Por qué no hay uno del 2007 que se te aparezca con un It's Britney, bitch.» 

No me he reído a carcajadas, pero es entretenido y se lee rápido. El estilo narrativo es cercano, como oír la historia de un viejo amigo. Perfecto para matar el rato.

«Volvía a tener miedo, ese miedo que solo se siente en la oscuridad de tu habitación, cuando temes que haya algo acechando a pesar de que sabes que no es real.»