Acércate | Sara Gran

Traducción: María Pérez de San Román | Ilustración de cubierta: Rafael Martín Coronel | Editorial: La Biblioteca de Carfax

SINOPSIS

Amanda es una arquitecta de éxito felizmente casada, quien, un día, empieza a experimentar extraños fenómenos: una propuesta dirigida a su jefe es sustituida por otra llena de insultos obscenos, unos extraños golpeteos no cesan de oírse en su casa, siente la necesidad de volver a fumar y termina quemando «accidentalmente» a su marido con un cigarro y por las noches sueña con una bella mujer de afilados dientes a la orilla de un mar rojo como la sangre. Amanda siente que su vida ha perdido el equilibrio y está deslizándose por una curva peligrosa, pero no termina de entender por qué.

No sabe si está poseída por un demonio o perdiendo la cabeza. En un rincón de su mente no cesa de preguntarse si en realidad no está disfrutando con todo lo que le sucede y eso la aterroriza aún más.

OPINIÓN PERSONAL

Amanda es una arquitecta de éxito felizmente casada, aunque puede que su vida no sea tan idílica como parece. La primera señal de que algo no iba bien fue un exabrupto con su jefe, cuando alguien cambió la propuesta sobre un nuevo proyecto en su despacho. Luego vinieron los ruidos y golpeteos en su apartamento... El matrimonio enseguida entró en una situación estancada de riñas y promesas rotas. 

Una noche, Amanda sueña con un océano rojo y una mujer llamada Naamah, quería estar siempre con ella y la amaba muchísimo. “Al principio, ella fue sutil.” El cambio de apariencia y en la personalidad es, como la Entidad Posesiva, sutil. Una voz que Amanda confunde con la suya propia y que le impulsa a hacer cosas que realmente quiere hacer, pequeños actos de rebeldía. “Me sentía más yo misma.”

Su vida pulcra y ordenada ahora la desquicia. Acércate no detalla la imagen clásica que tenemos de una posesión, aquí el demonio es una mujer recuperando el control de su vida. Y para ello, adopta comportamientos cada vez más agresivos. Todos nos hemos imaginado en situaciones morbosas alguna vez, ¿qué pasaría si hiciéramos lo primero que se nos pasa por la cabeza? 

Me lo recomendaron como una metáfora sobre el empoderamiento femenino. Sin embargo, el trasfondo social es una crítica tan velada que me ha parecido un libro de posesiones al uso y flojo. Amanda “pierde” el control de su antigua personalidad e intenta resistirse, se pregunta si está poseída, buscando soluciones atípicas y, en ocasiones, un poco tontas. Intenta resistirse, pero es una lucha con lagunas que solo araña la superficie de una trama mucho más profunda y reivindicativa. 

Disfrutable y entretenido, pero no es uno de mis imprescindibles.

«Por supuesto que se resistió al principio. Todas lo hacen. Pero a veces la puerta a una vida mejor se abre y no es tan sencillo decir “no”. No puedes pasarte toda la vida diciendo “no”. A veces tienes que decir “sí” y ver dónde te llevan.»