Cada corazón, un umbral | Niños descarriados 1 | Seanan McGuire

Traducción: María Pilar San Román | Editorial: Runas

SINOPSIS

Deslizándose entre las sombras bajo la cama, o a través de un armario, o por madrigueras de conejos... los niños siempre han sabido acceder a mundos mágicos. Pero ¿qué ocurre cuando regresan y no consiguen adaptarse y no son aceptados por sus familias? Eleanor West tiene un internado que acoge a estos niños que quieren volver a su mundo de fantasía. Pero con la llegada de Nancy algo cambia en el internado y pronto tendrán que enfrentarse a una tragedia por sí mismos.

OPINIÓN PERSONAL

Bienvenidos a la residencia de Eleanor West, un falso sanatorio que acoge a niños descarriados, que en realidad han cruzado puertas mágicas y han viajado a mundos de fantasía. Eleanor West es una escuela especial para niños que quieren regresar al mundo del que han sido expulsados para enseñarles a pasar página y que acepten que no van a volver, porque muy pocos han regresado.

La escuela ofrece charlas de orientación, clases y habitaciones compartidas entre adolescentes que no se llevan bien, parece el típico instituto con chicas populares y marginados. Algunos padres no quieren que sus hijos vuelvan a casa y los niños están condenados a quedarse aquí para siempre. Condenados, sí, porque la mayoría de sus conversaciones giran en torno a su deseo de volver, es un tema recurrente.

La premisa me atraía, pero el desarrollo, de corte adolescente, se hace repetitivo, superfluo y me ha llegado a aburrir. Hablan de cosas intrascendentes, no me caen demasiado bien y las explicaciones de la fantasía entran en bucle. De pronto, ocurre un suceso inesperado y los cinco protagonistas contados se ponen a investigar un misterio que hemos visto demasiadas veces y que, por ello, no sorprende.

Destaco principalmente lo inclusivo que es, protagonizado por una chica asexual y un chico con disforia de género, dos temas muy bien llevados. De hecho, toda la historia es una invitación a aceptar los mundos interiores de cada persona, un canto a la diversidad con un toque de fantasía oscura. El trasfondo es precioso.

«Al fin y al cabo, el hábito de narrar no es algo con lo que resulte sencillo romper. A veces era lo único que te quedaba».

«Si abres la puerta adecuada en el momento adecuado, puedes encontrar por fin un lugar en el que encajas».