06 agosto 2023

Reflejo mortal | Óscar M. Antón

 


SINOPSIS

Nuria, vive insegura de su cuerpo, hasta que un día se encuentra con un hermoso espejo de la era Victoriana, el cual le concede el deseo de la belleza. Pero todo deseo conlleva un un precio.


OPINIÓN PERSONAL

Nuria siempre ha soñado con llenar los mejores teatros musicales, pero nadie tiene en cuenta su talento para cantar porque no es muy agraciada. Todo cambia cuando encuentra un espejo victoriano que le concede el don de la belleza. Sin embargo, la belleza vale vidas humanas: si Nuria quiere seguir siendo guapa, tiene que matar gente y alimentar al espejo con su sangre.

«Espejo, espejito mágico, ya sé que tienes hambre.» Obsesionada con el aspecto físico que le ha abierto las puertas del éxito, Nuria mata gente que «merecía morir y estorbaban en su vida». Porque todos los cambios no han sido a mejor y la historia enseña las ventajas e inconvenientes de ser guapa.

Nuria se vuelve una psicópata de un día para otro, matando sin preocuparse de no dejar huellas. Por suerte para ella, la investigación policial es prácticamente nula. Los inspectores que llevan el caso se toman su tiempo e ignoran las pruebas más evidentes, incapaces de incriminar a la única sospechosa que tienen.

Mientras tanto, ella hace vida "normal" con su mejor amiga, que tampoco es muy avispada. De hecho, la historia no se centra en los asesinatos. Las muertes ocurren en dos líneas, las víctimas apenas tienen protagonismo, y me ha faltado tensión en el ambiente. Es una prosa correcta pero esquemática; aunque tiene buen material de base, le falta profundidad.

La novela mezcla el terror con un punto de romance (algo anticuado) cuando las dos amigas encuentran pareja, pero la ceguera y lealtad extremas de unos y otros no me acaba de convencer. La fórmula de un buen slasher comprende personajes incautos hasta lo inaudito, pero es que no puedo creerme lo que leo. 

El final es un giro apropiado, muy del género, y nos regala un epílogo/relato que cierra bien la maldición del espejo.


«Siempre bella, siempre hermosa, siempre triunfante.»

«Había conseguido su belleza de un día para otro y tenía sus dudas sobre si era un milagro o una maldición.»


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