06 febrero 2024

Paranoid Kids | Juan Bauty

Ilustración de cubierta: Juan Bauty


SINOPSIS

Se acerca la Navidad de 1987, e Iván Bartolomé, un inquieto chico de doce años y medio, lo descubrirá por sí mismo cuando se mude con su familia a un apartado (y algo destartalado) bloque de pisos situado en la periferia de la ciudad, y sobre el que pesa una terrible maldición e innumerables leyendas urbanas. Allí conocerá a sus peculiares nuevos vecinos y amigos, unos chicos con demasiada afición por lo misterioso y lo extraño, que le arrastrarán hacia espeluznantes (y en ocasiones peligrosas) aventuras...


OPINIÓN PERSONAL

6 de noviembre, 1987. La familia de Iván Bartolomé, un niño de 12 años, se muda a un viejo edificio con un pasado oscuro en medio de “La Nada”. El Edificio Torreón fue fundado en 1974. Ese mismo año, un niño desapareció en el último piso. Desde entonces, el piso trece permanece sellado, todo el mundo habla mal de este barrio desolado y los anteriores inquilinos de su actual vivienda duraron poco aquí. «El edificio arrastraba siniestras leyendas desde el incidente del piso trece.»

Quizá sugestionado por las leyendas urbanas y por una ambientación que pone los pelos de punta, Iván comienza a escuchar ruidos extraños en el piso, lo que parecen garras arañando las paredes, y suceden otros sucesos paranormales, como que las puertas del armario se abran solas. 

Poco después de la mudanza, Iván conoce a “los Malditos”, un grupo de cinco chicos que también viven en el barrio y que parecen tan interesados como él en investigar sucesos misteriosos e inexplicables. Los amigos tienen un humor muy de su edad, con ese tono infantil entrando en la adolescencia.

Es un libro cargado de referencias, sobre todo porque tiene ese aire ochentero que muchos disfrutamos. He reconocido un sinfín de cosas que siempre me molaron en la adolescencia, detalles que aparecían en los libros y películas de aquella época, y en ese sentido me ha parecido una novela muy disfrutable.

También maneja los tiempos que da gusto, te adelanta con pequeñas pinceladas que algo pasa, pero te mantiene en suspense, entretenido hasta las últimas páginas. Hay que tener en cuenta que es terror juvenil, señalando esto como algo positivo. Me habría dado más susto a la edad recomendada, algunos personajes me parecen casi cómicos (tal vez fuera la intención), lo que no impide que haya devorado todas las páginas con la misma curiosidad.

El desenlace nos deja con muchos interrogantes e invita a seguir leyendo la serie.


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