Diseño de cubierta: Isaac Minaya
SINOPSIS
En la tranquila ciudad de Dahellos, donde la vida parece transcurrir sin sobresaltos, el pequeño grupo religioso llamado «El Rebaño de Jesús» ha sido siempre visto como gente de bien, conocida por su humildad y devoción.
Sin embargo, la visita de un miembro notable del Rebaño llega para «fortalecer» la espiritualidad de sus miembros. Su particular forma de dar testimonio desata fenómenos extraños y aterradores que revelan secretos oscuros que nadie esperaba.
Isaac Minaya teje una historia llena de suspense, donde la fe, el miedo y la oscuridad se entrelazan, revelando que, a veces, el mal se oculta tras los rostros más amables.
OPINIÓN PERSONAL
«El rebaño de Jesús» es una organización religiosa que sigue las normas cristianas en pleno siglo XXI. Las ovejas y pastores se relacionan entre ellos y viven aislados del resto del mundo, excepto para divulgar la palabra de su Señor y Rey Jesús. Pero los «jóvenes poseen lo que sus padres no tuvieron: información» y algunas ovejas se están descarriando.
Elías Darwin, el mayoral más joven de la organización, visita Dahellos para ayudar al rebaño a seguir las directrices marcadas. Su cometido es guiar y dar aliento a los miembros, pero la llegada del joven islandés anuncia un «nuevo entendimiento».
La primera parte de la novela es una composición más coral que describe los inicios de la comunidad y nos presenta a los miembros más destacados, que luego tendrán un papel protagonista en la trama. Dahellos es una ciudad, pero el rebaño recuerda a un pueblo pequeño, donde todos cotillean, juzgan y se meten en las vidas ajenas, cuando estarían mejor callados. «En el rebaño había mucha hipocresía» y aquí todo el mundo esconde algo.
El arco de los personajes es un retrato social, no solo religioso. Algunos utilizan la fe para manipular y estafar, otros discriminan a sus seres queridos porque no cumplen las directrices de un libro sagrado que han interpretado mal. Desarrolla situaciones comunes que, por desgracia, existen fuera de la ficción. La fe ciega tiene peso, pero no es el centro de su discurso, también propina una pincelada de crítica social a las redes sociales y otras prácticas diarias que nos han deshumanizado.
El argumento paranormal me ha intrigado desde el principio, una historia normal y corriente de pronto deriva hacia una historia para no dormir, transformando la normalidad en una fantasía religiosa que roza el terror sanguinolento. El narrador tiene un punto de humor negro que complementa una trama ya de por sí oscura.
Me parecía complicado cerrar una historia tan amplia que abarca tantas vidas, una de las escenas finales me sabe a poco, aunque es un desenlace correcto. Las últimas páginas son un guiño y confirman la “dimensión” de lo anterior. En general, es un libro que me ha gustado y entretenido, se devora de una sentada.
«El fin estaba cerca y a todo el que estuviera con vida en ese momento y no siguiera las pautas del Creador, moriría y desaparecería para siempre».
«El ser humano le parecía asombroso a la vez que muy estúpido».
Otros libros del autor: Obscu
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