Ortiga y hueso | T. Kingfisher

Traducción: Mercedes Guhl | Editorial: Gran Travesía

SINOPSIS

Después de ver a sus hermanas sufrir durante años a manos de un príncipe maltratador, Marra —la tímida hermana menor criada en un convento— se da cuenta por fin de que nadie vendrá a rescatarlas. Nadie, excepto ella misma. Entonces, una poderosa bruja le ofrece a Marra los medios para matar al príncipe, si primero es capaz de completar tres tareas imposibles. Pero, como es habitual en los cuentos de príncipes, brujas e hijas marginadas, lo imposible es sólo el principio.

A la misión de Marra se unen la bruja, una renuente hada madrina, un excaballero caído en desgracia y una gallina poseída por un demonio. Juntos, intentarán liberar a la familia de Marra y a su reino de su tirano gobernante.

OPINIÓN PERSONAL

La princesa Marra es la menor de tres hermanas, a las que ha visto sufrir a manos de un príncipe. Su madre las ha casado por conveniencia, mientras que Marra fue recluida en un convento para que no interfiriera en los planes del reino portuario. Después de años separada de su familia, parte en busca de una bruja que le dará las herramientas para matar al príncipe. Porque nadie más va a salvar a sus hermanas.

Los escenarios que recorre durante su viaje son una delicia, tierras malditas donde habitan seres de fantasía. No esperaba un relato tan oscuro, los pensamientos de los personajes acostumbran a ser bastante lúgubres. Pero también es un libro que me ha sacado una sonrisa encantada, algunos detalles de la travesía son tan absurdos, a veces disparatados, que no da tiempo a aburrirse. Y el grupo tiene justo el sentido del humor que me hace gracia.

Marra no está sola, la acompañan un excaballero, una bruja, una gallina poseída por un demonio y un hada madrina. Fenris me ha gustado especialmente por lo que representa, un hombre bueno dispuesto a luchar a su lado, pero que no ensombrece la figura heroica de la mujer. Su historia denuncia la violencia y el abuso de poder de las personas que no puedes llevar ante la justicia, con un final muy satisfactorio.

En pocas palabras, todos los personajes son entrañables y derrocha imaginación.

«Nada es justo, salvo que intentemos que así sea».